La región del cante era la más extensa de todas y además se superponía en su territorio con las otras dos regiones fundiéndose en un solo “sentío”; aunque existían comarcas esencialmente cantadas a capella. Dentro de esta gran región, convivían muchas comarcas que recogían a todos los palos del flamenco; desde los fandangos más populares hasta las zambras más exquisitas pasando por sus alegrías u bulerías más festeras.
Otra de las regiones se centraba en el baile que coincidían en mucha de sus leyes con muchos de los territorios del cante y se reflejaban en sus movimientos la variedad de los movimientos marcados inevitablemente por sus acentos y melodías.
En la mayor partes de las ocasiones; el baile siempre tenía la presencia de unas o de las dos de sus regiones vecinas y se complementaba entre sí manifestando el mismo mensaje.
Por último la región que quedaba era la del toque era la más pequeña pero la más variada y rica. En el toque encontrábamos a los pequeños pueblos de las guitarras, la percusión y las palmas; que al igual que sus vecinas regiones se diferenciaban por los acentos y tipos de cantes.
Era algo misterioso, pero mágico, lo que sucedía en este país cuando se alienaban los astros y coincidían grandes representantes de estas tres regiones fundiéndose en un solo ser .Con toda esta búsqueda de la máxima expresión en estas tres regiones; a veces surgía la magia y aparecía el tan valorado y apreciado “duende”, que manifestaba el máximo esplendor en los sentimientos de su habitantes dado al calado de sus mensajes y sus formas de expresarlo. Sin Duda el Rey oculto de este país del flamenco.
Autor: Feliciano Nogales Alcaide.
Para terminar , pasamos a disfrutar de una divertida serie animada en torno el flamenco para los más jóvenes.
Gerundino, un duende que vive en una guitarra, viaja a lo largo y ancho de la historia del flamenco acompañado por tres amigos para conocer este arte.
Para verla pincha aquí.
Más recursos:
http://flamencoprimaria.blogspot.com/2010/02/flamenco-y-juegos-populares.html
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